Estadísticas realizadas por diversas instituciones específicas en lo que atañe al incremento poblacional y concretamente al segmento de jóvenes y futuros electores del Dpto. de Santa Cruz, confirman una tácita nueva realidad política en Bolivia.
Concitando un verdadero desafío en propuestas a políticas a futuro, replanteando el norte de obsoletas estrategias superadas con el tiempo, coligiéndose que deben evolucionar, renovarse con mira a futuras contiendas electorales, eligiendo pertinentemente nuevos gobiernos con la determinante incidencia cruceña a este ámbito orientada coherentemente a 5 años de gestión democrática.
Santa Cruz en incuestionable valerosa e histórica emancipación, siempre lideró la justa defensa en equitativas conquistas, aún a costa de inauditos y crueles hechos sangrientos de barbarie como lo acontecido el 19 de mayo de 1958, en “La Masacre de Terebinto” con la cobertura del gobierno de aquella época (MNR), a las órdenes de los sanguinarios y despóticos, Hernán Siles Zuazo, Juan Lechín Oquendo y Walter Guevara Arce; que fueron cumplidas por aquella perversa jauría que aleccionados, torturaron y asesinaron impunemente a los que denominaban “karas” y para gloria del MNR; tiñeron con sangre falangista la campiña cruceña.
Fue entonces que el Pdte. Siles Suazo ofertó a los cruceños “50 mil pasaportes”, dando luz verde para abandonar el país y que ironía, su tierra natal; habiéndose sofocado con macabra masacre, el justo reclamo del 11 % de las regalías petroleras exigidas por la Unión Juvenil Cruceñista.
“Actualidad Informativa” insta a que se guarden en la memoria, como en los anales históricos, aquellos incalificables acontecimientos que no deben servir jamás ni de precedentes específicos, los tiempos han cambiado, hoy Santa Cruz lidera la economía, es el granero del país; la industria se ha incrementado conjuntamente con el espíritu empresarial y visionario cruceño, así como también el desarrollo potencial; reiteramos hace descartar otros Terebintos, el vigor cruceño constituiría hoy una coraza, descartando así redición inicua e inaudita, también contingencia como la protagonizada y gestada por aquellas hordas ucureñas que tranquilamente tomaron el Club Social 24 de Septiembre, como inicuo guion de “terrorismo sin límite”. ¡¡¡Nunca más hordas ucureñas que superaron hechos vandálicos o diríamos, de los potros de Atila…!!!