Encomiablemente de modo solidario y en el afán de que el largo período de paro registrado en Santa Cruz, tras resolución del último cabildo, el directorio interinstitucional decretó esta medida de carácter indefinido al margen de esenciales miramientos; implícitamente de consideraciones con los socios y usuarios de cooperativas de servicios públicos básicos, en contexto del desmesurado paro sin precedentes.
Advertimos que en las redes sociales se endilga que la lamentable y dura medida está signada por la violencia, el racismo, la discriminación, cobros en puntos de bloqueo y saqueos a sedes sociales y negocios, como marco de esta durísima medida y de sus inauditas consecuencias de diversa gama y desde luego originando deplorables contingencias, tácitamente de iliquidez.
Hoy una vez más la CRE denota sensibilidad social y, en fin, una posición acorde con el movimiento cooperativo planetario en torno a principios y valores que notablemente con el mejor espíritu, no soslaya, al informar al universo de socios y usuarios del fluido eléctrico que la CRE, postergó el corte del servicio de energía eléctrica, “esto quiere decir que una vez que acabe el paro tendremos un mes para ponernos al día (en las deudas). También en ese mes podemos acudir a la Cooperativa para hacer planes de pago”, apostrofó en su página institucional el vocero de la CRE, Amílkar Jaldín.
No dudamos que la comunidad cruceña está en el referido espíritu propagando, difundiendo cálidas consideraciones con la CRE, tácitamente con su extraordinaria e inédita resolución, mientras por nuestra parte felicitamos cálidamente a esta institución, esencialmente humanitaria, muy eficiente y por supuesto, al Lic. Amilkar Jaldín Rojas, digno y meritorio vocero de la CRE.
Colegimos en fin, que esta dura contingencia deja advertir fulgurante y esperanzadora luz en el obscuro y torvo ambiente que hoy vive Santa Cruz.
